La naturaleza los une en un atardecer, en las bandadas de pelícanos, en la dulzura de un niño con su algodón de azúcar o en los pétalos que acaricia el cielo. Así son el Rose Quartz & el Serenity, un tándem perfecto: romántico, pálido, suave y goloso. ¿Alguien da más?
Espero que os sirva, Mar Gago