Desde luego no hace falta que un estudio afirme que es mejor elegir la ropa la noche anterior, que las mujeres dedicamos 287 días a «qué me pongo», y que por la mañana nos lleva 16 veces más tiempo decidirlo. Sí: 16. Tampoco hace falta que expertos y estilistas también lo recomienden.
Lo que debemos hacer es recordar que entre vestirse y arreglarse hay la misma diferencia que entre cantar y desafinar. Que nuestro atuendo incide directamente en la autoestima y que dejar elegida nuestra ropa por la noche alivia nuestra mente para el descanso y simplifica el inicio de la jornada. Además:
-Evitarás sorpresas (Blusa sin planchar o mancha inesperada)
-Ganarás tiempo para ti, sea para madrugar menos o tomar café con más calma.
-Puedes crearte un ‘uniforme’ (cortes de pantalón o colores que te funcionan) y probar otras combinaciones durante la semana.
Pero ten en cuenta que:
-Tu estado de ánimo fluctúa. Quizá de noche estabas melancólica y hoy despiertas alegre y motivada.
SOLUCIÓN: Deja siempre un par de accesorios de color para alegrar el look.
-El clima también fluctúa. Ayer fue caluroso pero hoy amanece con frío y lluvia.
SOLUCIÓN: Ten a mano zapatos y prenda exterior más de abrigo.
-Tu cuerpo, también. Te acostaste ligera y te levantas hinchada.
SOLUCIÓN: Siempre hay que tener prendas flojas que animaremos con un collar o accesorios adecuados.
Todo esto depende de dos cosas:
-El necesario y coherente fondo de armario.
-Pasar revista el domingo: todo debe estar planchado, limpio y en su sitio.
A cambio, la semana se volverá mucho más ágil y nuestro ánimo, mejor dispuesto. Vale la pena?
Os dejamos un look básico de Zara para que disfrutéis de comenzar cada día con buen pie.
Espero que os sirva, Mar Gago.